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jueves, 13 de septiembre de 2012

Asado Argentino en Portland

"La vida es lo que te sucede mientras estás ocupado haciendo otros planes" by John Lennon.
Esta historia es una clara enseñansa de que tal vez, y solo tal vez, no decidimos nada de lo que nos va a pasar. 

Ayer, como todos los días, estaba en la fila de la cafetería para pagar mi comida y delante dos personas hablaban en español. Fiel a mi estilo, no me pude resistir y les dije: "Ojo con lo que dicen que yo los entiendo". Inmediatamente me reconocieron como argentina y a eso siguió la invitación a compartir la mesa y a conocer a los otros argentinos que estaban formando parte de un curso en el mismo campus en el que yo trabajo. La mayoría de ellos con una larga historia en US de no menos de 10 años.

Una charla típicamente argentina con todos los clásicos que no necesitan que les detalle, incluida la mención del partido de Argentina contra algún otro equipo que ni siquiera recuerdo. Desde luego, como tenerlo en mente si no me gusta el futbol!. La cuestión es que tanta camaradería argentina abrió la puerta a una cena con asado y futbol de por medio. Y, por supuesto, me sumé.

Lo más interesante de la historia es que, casi nadie, miró el partido. Sólo los hijos pequeños de una de las parejas se sentó frente a la pantalla boba. Todos los demás nos pasamos la jornada charlando  y conociendo cada historia. Una por una especial y distinta, como idas y vueltas, con cambios, con altas y bajas, pero todas con la marca argentina.

Y porque es especial esta historia? Porque entre las nuevas personas que conocí, por hacer un comentario en la cola para pagar el almuero, descubrí a una antropologa que se dedica a investigación social y que trabaja directamente con una de las personas que más admiro en mi empresa, y a otro argentino que trabaja en uno de los lugares más secretos y a la vez cautivantes de esta compañía, una planta de producción de microprocesadores. Ambos con narraciones interesantes, ambos con una historia que contar y anecdotas que compartir.

Jamás los hubiera conocido siguiendo un plan. Nunca me hubiera enterado de que hay gente que hace lo que ellos hacen, tan lejos de mi actividad diaria tan sólo siguiendo objetivos o el lineamiento de "hacer networking".

A través del vino y la picada, el asado y la ensalada, tuve un baño de humildad que cada tanto está bien recibir. La vida es mucho más que planes, tiene que ser una experiencia en la que te conectes con lo que te rodea sin creer que podes tener todo bajo control.

Porque cuando crees que lo estás controlando todo, tal vez, la vida te está controlando a vos.





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